Mientras los focos del mercado financiero permanecen obsesivamente fijados en Nvidia, International Business Machines (IBM) ejecuta una de las transformaciones más significativas del sector tecnológico. Contrariamente a su imagen pasada como un dinosaurio corporativo, IBM ha demostrado una agilidad extraordinaria, materializada en un rendimiento bursátil que supera el 45% desde enero y deja atrás incluso al gigante de los semiconductores. Este renacimiento corporativo encuentra sus pilares en el crecimiento explosivo de sus servicios en la nube y soluciones de inteligencia artificial.

Resultados que Despejan Dudas
El informe del tercer trimestre de 2025 despejó cualquier escepticismo residual sobre la recuperación de IBM. La compañía no solo superó expectativas, sino que lo hizo con contundencia: unos ingresos trimestrales de 16.300 millones de dólares respaldados por un beneficio ajustado por acción de 2,65 dólares, muy por encima de los 2,45 dólares que anticipaban los analistas. La confianza directiva se reflejó inmediatamente en una revisión al alza de sus perspectivas anuales, proyectando ahora un crecimiento de ingresos superior al 5%.
WatsonX: El Motor del Crecimiento
Detrás de estos números se encuentra el imparable avance de WatsonX, la plataforma de IA generativa de IBM que está capturando el interés del mercado empresarial. El volumen de negocio en este segmento experimentó un salto espectacular, escalando desde los 6.000 millones de dólares en mayo hasta superar los 7.500 millones en julio. Este dinamismo se traduce en indicadores concretos:
- Un crecimiento interanual del 9,1% en los ingresos trimestrales
- Una mejora en la previsión de flujo de caja libre, ahora establecida en 14.000 millones de dólares
- La adquisición estratégica de Txture en octubre para reforzar capacidades en la nube
Reestructuración con Visión Estratégica
El anuncio de recortes de personal para el último trimestre podría interpretarse como una contradicción, pero responde a una reorientación estratégica deliberada. IBM está canalizando recursos específicamente hacia el desarrollo de software y servicios cloud impulsados por inteligencia artificial. El consejero delegado ha aclarado que, a pesar de estos ajustes, las contrataciones netas alcanzarán su nivel más alto en cinco años.
Paralelamente, la compañía consolida su liderazgo tecnológico mediante su participación en la segunda fase de la iniciativa de benchmarking cuántico de DARPA, un aval significativo para su estrategia en computación cuántica.
En el ámbito accionarial, IBM mantiene su compromiso con los dividendos, confirmando un pago de 1,68 dólares por acción que representa una rentabilidad del 2,2%. La fecha ex-dividendo queda fijada para el 10 de noviembre.
