El gigante del comercio electrónico chino, Alibaba, ha iniciado una contundente ofensiva en el competitivo mercado de la inteligencia artificial dirigida al consumidor final. La compañía ha lanzado una aplicación de IA gratuita que pretende competir directamente con ChatGPT, marcando un cambio significativo en su estrategia anteriormente centrada en el ámbito empresarial. Este movimiento se produce en un momento crucial, justo antes de la publicación de sus resultados trimestrales.
Un mercado dominado por competidores
Hasta ahora, Alibaba había mantenido un enfoque predominantemente orientado hacia clientes corporativos, quienes accedían a sus soluciones de inteligencia artificial a través de su división de computación en la nube. Mientras tanto, sus principales competidores nacionales consolidaban su posición en el segmento de consumo:
- ByteDance (Doubao): 150 millones de usuarios activos mensuales
- DeepSeek: 73,4 millones de usuarios
- Tencent: 64,2 millones de usuarios
- Alibaba (Tongyi): solamente 6,96 millones de usuarios (septiembre 2025)
Estas cifras evidencian la considerable desventaja en la que se encontraba la empresa frente a sus rivales directos en este sector específico.
La respuesta: integración y tecnología propia
El lanzamiento de la aplicación Qwen, disponible tanto en versión móvil como web, representa la unificación de los diversos productos de inteligencia artificial que Alibaba mantenía dispersos bajo diferentes submarcas. La compañía describe esta herramienta como "el mejor asistente personal de IA con el modelo más potente", basándose en su tecnología de lenguaje propia.
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El contexto temporal de esta ofensiva no es casual. El sector de la inteligencia artificial en China está experimentando una intensa guerra de precios, impulsada inicialmente por el enfoque computacional de bajo costo implementado por DeepSeek. Esta situación ha obligado al resto de los actores del mercado a reaccionar, incluyendo a Alibaba, que no podía permitirse permanecer al margen.
Desde la perspectiva tecnológica, la compañía cuenta con activos significativos. Su modelo de código abierto Qwen ha superado los 600 millones de descargas a nivel global, representando más del 30% de todas las descargas en la plataforma Hugging Face. Entre sus desarrollos futuros se encuentran agentes de compras capaces de realizar transacciones en Taobao y Tmall mediante lenguaje natural, lo que permitiría una integración directa con su negocio central de comercio electrónico.
Reacción del mercado y perspectivas financieras
La respuesta inicial de los inversores ha sido moderada. Las acciones de Alibaba en Hong Kong registraron un descenso del 0,5% durante la jornada del lunes. La atención se centra ahora en los resultados del tercer trimestre, que se harán públicos el 25 de noviembre.
Las expectativas de los analistas proyectan unos ingresos de 242.650 millones de yuanes, lo que representaría un modesto crecimiento del 2,6%. En cuanto al beneficio por acción, las previsiones anticipan una disminución considerable del 63,6%, situándose en 5,49 yuanes.
Estas proyecciones reflejan la compleja transformación que está atravesando Alibaba, transitando desde su tradicional modelo centrado en el comercio electrónico hacia una corporación tecnológica diversificada en computación en la nube, inteligencia artificial y expansión global. La cuestión fundamental que permanece abierta es si esta ofensiva en el segmento de consumo de inteligencia artificial llegará a tiempo para reactivar el crecimiento y recuperar la confianza de los inversores.
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