La firma financiera HSBC ha sorprendido al mercado con una valoración extraordinariamente positiva sobre Nvidia. El analista Frank Lee no solo ha mejorado su recomendación de "Mantener" a "Comprar", sino que ha establecido el precio objetivo más elevado de Wall Street: 320 dólares por acción, lo que sugiere un potencial alcista cercano al 80% desde los niveles actuales.
Fundamentos de un optimismo sin precedentes
¿En qué se basa esta confianza extrema? Lee proyecta que los ingresos del segmento de centros de datos de Nvidia alcanzarán los 351.000 millones de dólares para el año fiscal 2027. Esta cifra supera en un significativo 36% el consenso general del mercado, que se sitúa en 258.000 millones.
Las previsiones de beneficios son aún más llamativas. El analista anticipa 8,75 dólares por acción para el mismo período, muy por encima de los 6,48 dólares que espera el promedio del mercado. Esta divergencia refleja una visión particularmente optimista sobre la expansión del mercado de GPUs para inteligencia artificial.
Proyectos colosales impulsan la demanda
Detrás de estas proyecciones se encuentran iniciativas concretas de gran envergadura. La iniciativa Stargate y los planes de infraestructura de OpenAI podrían generar entre 250.000 y 400.000 millones de dólares en ventas de GPUs durante los próximos años.
"Anticipamos que el mercado direccionable para GPUs de IA continuará expandiéndose más allá de los hiperscaladores tradicionales", explica Lee en su análisis. Esta perspectiva sugiere que el crecimiento trascenderá a gigantes establecidos como Amazon y Microsoft.
La capacidad de producción evidencia esta tendencia: HSBC proyecta que TSMC incrementará su fabricación de GPUs hasta 700.000 obleas para 2027, representando un aumento del 140% respecto a los niveles actuales.
Perspectivas favorables en el mercado chino
Un factor adicional que podría impulsar a Nvidia proviene del frente regulatorio. Lee considera probable una relajación progresiva de las restricciones comerciales con China, interpretando las actuales limitaciones como temporales.
El analista señala la posibilidad de que "las incertidumbres sobre GPUs en China se alivien tras un potencial acuerdo comercial entre Estados Unidos y China". Este escenario sería transformador para Nvidia, dado que el mercado chino representa una oportunidad monumental en infraestructura de inteligencia artificial.
La recuperación de la demanda desde China añadiría un poderoso impulso adicional a la ya robusta trayectoria de crecimiento que visualiza HSBC para el fabricante de chips.
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